Sunday, March 19, 2006

plasticlandia

Abre los ojos.
El foco tarda.
Efecto reflejo de el mundo viniéndosele encima...la imagen la choca.
Resplandor de mediodía, se resplandece en la sabanas de satén.
Almohadones, muchos.
Virginia estira una pierna, y vuelve a desplomarse.
Respira hondo y se sienta en la cama…
Recorre la habitación con la vista, reconstruyendo mentalmente la noche anterior.
Los zapatos tirados en la puerta.
La inauguración de la muestra y ella con un vestido ajustado, impecable.
La copa de champagne en sus manos se asemeja a una joya cuando la iluminan los flashes.
El vestido revuelto en el piso junto a los pantalones grises de él.
Él, tomándola con fuerza de la cintura mientras bajan por las escaleras del club.
Su cartera de perlas llena de perlas que se consumen en el baño.
Las sonrisas cada vez mas rojas. Las fotos, los saludos de extraños.
Loud music all night, resuena todavía en su cabeza.
El recorrido se detiene en el espejo, que le devuelve la imagen de una mujer desnuda, entre sabanas que parecen pétalos, ella sentada en una amapola.
Suspendida.
Sale de la cama…busca algo de ropa.
Tambalea hasta el baño.
Desde la puerta mira el cuerpo tirado en la cama, y en su rostro ve el reflejo del hastío.

En el baño ve su cara resplandeciente, brillante, de piedra.
La pintura no se ha corrido water-resistant.
Su cabellos revueltos le quedan bien y se iluminan con los spots.
Sin embargo ella se siente miserable. De plástico.
Se moja las muñecas con agua fría, la nuca, la frente.
Se mira en el espejo con odio y se pasa las manos húmedas por el rostro corriendo la pintura.
Los surcos negros que parten de sus ojos y enmarcan sus mejillas.
De su boca líneas carmín caen como una cascada por su mentón y el cuello.
Levanta la vista, se ve nuevamente, y ahora sí, sonrie.