café

Un timbre.
Un timbre que suena.
Un timbre de despertador. Pudo haber sido la campanilla de un telefono...
Un despertador suena! Mi percepcion se agudiza
...suena cerca de mí. Entiendo que debo despertar....tengo tanta pesadez en el cuerpo que me parece imposible.
Suena para mí… WTF!
Entre abro los ojos y borrosamente llego a ver el aparato blanco sobre la mesa de luz marcando: 7:20
Lentamente mi cerebro empieza a descargar las informaciones pertinentes, me avisa y me obliga a levantarme.
Somnolienta y en bata, con movimientos lentos llego hasta la cocina.
Pongo a calentar el café... Dejo que mi mirada corretee por la ventana, desde la pequeña maceta que tengo sujeta a la cornisa, hasta las ventanas vecinas (sí, mi diminuto departamento da a un pasillo interno). Veo a mis cohabitantes haciendo lo propio. Cada uno en su pequeño mundo, se prepara para salir. Una madre sirve la leche a tres niños dormidos sobre la mesa. Un hombre de traje mira el cielo a las apuradas y desaparece tras su cortina blanca. Una pareja de amantes se despide con un breve beso.
El chirrido de la pava me avisa que mi café espera.