Thursday, May 29, 2008

Virginia sale al balcón y respira hondo. El sábado paso de largo casi por completo, y ella, todo el día de bata y en pantuflas y sin pintura…esperando nada.
Espera que el tiempo pase, que la noche termine….aaaa la noche…. la soledad se cuela por las venas de noche. Por eso a Virginia le gusta que pasen rápidas y movidas, sin estar muy conciente de su alrededor, sin fijarse demasiado en quien es quien… terminar junto a un cuerpo desconocido, salir corriendo a buscar un taxi a las 10 de la mañana, pedir facturas y comerlas en su cuarto acompañada de su té y de Gala. De esta manera uno entra abruptamente al domingo, y las incentivas de suicidio se resuelven con alguna película, a veces un par…y el lunes a trabajo y a dejarse tragar por la maquinola loca…